Formación online, clave en el fomento del emprendimiento

Durante los últimos meses tanto la educación online como el emprendimiento han sido temas que han estado instaurados en la agenda pública y que han sido objeto de debate. El primero, es consecuencia directa del confinamiento sufrido durante estos meses, donde las clases presenciales se vieron interrumpidas y, en muchos casos, ni el personal docente ni las instituciones educativas estaban preparados para dar este salto al mundo online.

El debate de la formación online se vuelve a avivar según se acerca el comienzo del nuevo curso escolar y a la espera de ver si esta vez con más tiempo, la formación online se muestra como lo que en verdad es, una alternativa más que viable frente la enseñanza tradicional.

En el caso del emprendimiento, el motivo por el que se ha puesto el foco mediático sobre él es debido a que debe de ser una respuesta frente a esta crisis. Como ya hemos comentado anteriormente, el emprendimiento consiste en estar en constante reinvención y cuando las ideas prefijadas pierden fuerza cobra una gran importancia para que las ciudades sigan desarrollando su crecimiento.

Ahora se nos plantea una nueva pregunta: ¿es posible que el avance y las mejoras en la formación online puedan tener como consecuencia directa una generación emprendedora? La respuesta es sencilla y contundente: rotundamente, sí.

Beneficios de la formación online para el emprendimiento

Esto se debe a dos motivos. El primero es el método de enseñanza. La formación online es la mejor manera de poder compaginar los estudios con otros proyectos, ya que permite organizar el tiempo como mejor convenga a cada persona y así poder invertir el tiempo que cada uno crea oportuno en cada tarea.

De la misma manera, la formación online premia en gran medida a aquellos alumnos que tienen interés por ir más allá de los conocimientos mínimos, convirtiendo a esas personas más conformistas en individuos más expeditivos, siendo esta una de las grandes características de cualquier emprendedor.

Por otro lado, por razones de soporte, la formación online está muy ligada al medio digital, así como a la implantación de las nuevas tecnologías. Dos características de gran interés para aquellos que buscan experimentar e innovar en sus proyectos.

A su vez, esta relación con las nuevas tecnologías es un caldo de cultivo excelente para que alumnos que no se plantearan en un principio seguir el camino del emprendimiento vean en este una posibilidad de aplicar esos conocimientos.

Para terminar, ha quedado claro que la formación online es un gran valedor del emprendimiento ya sea porque su forma de estudio se adapta más a las necesidades de los emprendedores o porque sus métodos despiertan en sus alumnos el sentimiento de emprender. Por lo tanto, se puede deducir que si un país quiere tener un músculo emprendedor fuerte debe facilitar y mejorar su formación online.